Punto de vista de Laura López
Es pequeña mi boca para condensar el torrente de palabras que brotan a cada golpe de verso, que acompasado por la fuerza del flamenco los eleva hasta rociarnos con el sentimiento y el arte de un gran poeta sin precedentes. Los acordes envuelven como arrullo de mar esa voz que representa el grito de la libertad de un hombre, de una mujer, de un pueblo extendido a la espera de esa caricia voluptuosa. Enmarcado en la tradición y cultura andaluzas, despliega sus poemas y conmueve al espectador desatando sus pasiones y sumergiéndolo en un mar de letras. Oleadas de ese canto vespertino inundan las gargantas y ahogan las enredaderas del lamento. La trama cautiva y transporta hacia un solo latir, hacia una sola respiración que es el ritmo que impone tu arte. Giros, verbos y el acariciar de unas cuerdas componen tan bello espectáculo que hace las delicias de cualquier mortal.
Laura López
Málaga