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4 de diciembre de 2010

Fiesta de cumpleaños de Alejandra Menassa, Helena Trujillo y Virginia Valdominos... con una gran sorpresa


Helena Trujillo, el Director de la Escuela de Poesía y Psicoanálisis, Dr. Miguel Oscar Menassa,
Alejandra Menassa y Virginia Valdominos

Poema de Alejandra Menassa a H. Trujillo; V. Valdominos

Discurso de compromiso de Alejandra Menassa y poema

Poema de cumpleaños de Helena Trujillo

Poema de cumpleaños de Virginia Valdominos

Poema de Amelia Díez

Poema de Claire Deloupy

Poema de Clémence Loonis

Poema de Emilio Porta

Poema de Carmen Ortigosa a A. Menassa; a H. Trujillo; a V. Valdominos

 


La fiesta tuvo lugar en el Restaurante Viena de Madrid

Miguel Oscar Menassa con Pablo Díaz de la Casa, amigo y maitre durante muchos años del Café Viena
Amelia Díez, psicoanalista del Grupo Cero, y Miguel Oscar Menassa
Olga de Lucia y Miguel Oscar Menassa
Olga de Lucia, Miguel Oscar Menassa y Manuel Menassa
Miguel Oscar Menassa con Esperanza y Pedro, padres de Virginia
Cruz González y Miguel Oscar Menassa
Helena Trujillo
Virginia Valdominos y Miguel Oscar Menassa
Virginia Valdominos, Miguel Oscar Menassa y Mónica López Bordón
Jaime Kozak, Miguel Oscar Menassa y Miguel Martínez
Miguel Martínez junto a su madre y hermanas
Fernando Ámez, Concha Osorio y Miguel Martínez
Miguel Oscar Menassa junto a Carlos Rodríguez. De pie Amelia Díez
Helena Trujillo, Alejandra Menassa y Virginia Valdominos
Emilio Porta, Alejandra Menassa y Miguel Oscar Menassa
Cruz González, Soledad Caballero
y Socorro Montes de Oca
Los invitados llegaron puntualmente
Fernando Ámez y Amelia Díez Cuesta
Stella Cino
Virginia Valdominos estaba deslumbrante
Claire Deloupy y Virginia Valdominos
Olga de Lucia, Helena Trujillo, Claire Deloupy, Alejandra Menassa y Virginia Valdominos
Pilar Rojas, Paola Duchên, Concha Osorio, Olga de Lucia, Helena Trujillo, Claire Deloupy,
Alejandra Menassa, Virginia Valdominos y Amelia Díez
Emilio Porta, Vicesecretario de la Sociedad Española de Escritores, junto a Alejandra Menassa
Emilio Porta
Manuel Menassa y Clémence Loonis
Socorro Montes de Oca y Pilar Rojas
Elena Conchello y Adrián Castaño
Alejadra Menassa y Miguel Martínez anunciaron su compromiso
Todos en la sala quedaron sorprendidos
Marta Herráez y Antonia López
Hernán Kozak
Miguel Oscar Menassa, acompañado por Carlos Rodríguez, recitó el poema "Llantos del nacer"
de su libro "Llantos del exilio"
Miguel Oscar Menassa
Paloma Benito y Pablo Borrego
Pablo Borrego interpretó varias piezas
Elena Conchello y Txiki Álvarez representaron un capítulo de "No Ve La Rosa" de Miguel Oscar Menassa
Elena Conchello y Txiki Álvarez
Menassa observa la actuación de Elena Conchello y Txiki Álvarez
Menassa se divirtió como nunca
Leandro Briscioli y Adrián Castaño, Indios Grises, también cantaron algunos de sus mejores temas
Mariela Köl acompañada por Carlos Rodríguez interpretó varias canciones de su extenso repertorio
Carlos Rodríguez al piano
Pilar Rojas y Helena Trujillo
Kepa Ríos brindó por los novios
Miguel Martínez estaba emocionado
Pilar Rojas
Pilar Rojas, Virginia Valdominos, Helena Trujillo y Paola Duchên
Amelia Díez y Kepa Ríos
Carmen Ortigosa y Mónica López Bordón
Magdalena Salamanca, Virginida Valdominos y Paloma Benito
Las anfitrionas leyeron poemas
La cantante peruana Mariela Köl y Fabián Menassa
Hernán Kozak, Gracia Esteban y Carlos Fernández
Luego vino el turno de abrir los regalos
Claire Deloupy leyó un poema dedicado a todas
Teresa Poy, Amelia Díez y Miguel Oscar Menassa
Susana Lorente y Luis Leiva
Mariela Köl y Miguel Oscar Menassa cantaron juntos
Hernán Kozak y Elena Conchello
Cruz González y Ruy Henríquez
Carlos Fernández y Pilar Rojas
Virginia Valdominos, Alejandra Menassa, Miguel Martínez, Pilar Rojas,
Miguel Oscar Menassa, Helena Trujillo y Carlos Fernández
Amelia Díez y Ruy Henríquez
Virginia Valdominos, Alejandra Menassa, Helena Trujillo, Ruy Henríquez y Pilar Rojas

A HELENA EN SU TREINTAITRES CUMPLEAÑOS


Galeno te guarde, amada amiga,
que cumples hoy su cifra precisa,
la que arranca de torax inconclusos
sonoros signos para doctos oídos.
Repita: 33, 33 años como rosas
encendidas, y yo que escucho
te auguro una salud espléndida,
rodeada de hipocráticos amigos.
Andalucía, con sus 33 torres,
toca nubes gitanas y
en tu sangre de olivos se redime.
Los altos nidos de la palabra
rompen cielos azules en tercos campanarios,
y hacen, de versos, tu morada
las altivas cigüeñas de los años.

Alejandra Menassa

 

A VIRGINIA EN SU 32 CUMPLEAÑOS

La frescura de tus pasos reverdece los días,
tu entrega sin demora a la palabra arranca
sonrisas de mis cumplidos labios.
Corona tu cabeza color de noche la estrella
más humana: el pensamiento más certero.
La poesía te arrulla en su regazo.
Y pléyades de titanes envidian tu fuerza
y lozanía: esas manos hechas para el amor,
ese deseo impertubable de crecer.
La generosidad multiplica tus pasos,
hay otros en tus horas, compañeros de viaje.
32 soles resplandecen, estrangulando la ceguera.

Alejandra Menassa

 

DISCURSO DE COMPROMISO

Ustedes, compañeros del Grupo Cero, amigos, allegados, son mi familia ampliada. He celebrado con ustedes los últimos 20 cumpleaños, con algunos incluso más. Y hoy, además de la alegría de cumplir años rodeada de tanta inteligencia y de tanta belleza, y celebrarlo junto a dos compañeras a las que quiero especialmente: Helena Trujillo y Virginia Valdominos, deseo darles una noticia que sé que va a sorprenderlos. Por eso le quiero pedir a Carmen Salamanca que fotografíe sus caras cuando anuncie lo siguiente. Por favor, me hace falta un hombre ¿se puede acercar el Dr. Miguel Martínez por ejemplo? Es necesario incluir lo masculino para pensar la realidad.

Los compañeros del taller de Poesía que coordina el Dr. Menassa saben que el Dr. Martínez se ha pasado todo el último año y medio escribiendo poemas de amor como tarea del taller. Convertía con gran pericia en un poema amoroso hasta una oda a la zanahoria. Bueno, pues quizás yo podría ser la musa de alguno de esos poemas. Bueno, basta de alusiones: El doctor Miguel Martínez y yo queremos compartir con todos nuestra alegría por nuestro compromiso. Con el psicoanálisis, con la poesía y con la medicina ya estábamos comprometidos hace muchos años y seguiremos estándolo toda la vida, son deseos, y por tanto compromisos de larga duración, ahora además hemos decidido sumar a ese compromiso otro de índole distinta. No quiero decir más personal, porque no siento que nuestra decisión de caminar juntos sea una decisión personal. Esta vez siento que todo el mundo (al menos el mundo que me atañe y que me importa) está a favor de esta alianza.

Quizás a alguno de ustedes le parezca extraño que hagamos anuncio público de este compromiso, se ha producido así. Hace dos semanas no sabíamos que esto iba a suceder hoy. A mi modo de ver, es un hecho social, un acontecimiento, y no un cambio en la vida personal. Estoy casi segura de que este pacto que ahora se inicia oficialmente ha de traer importantes consecuencias económicas, tanto en la economía libidinal como en la economía política de la Comunidad Psicoanalítica a la que pertenecemos.

Quiero agradecer especialmente a mi padre, maestro, supervisor, tantas cosas es Miguel Menassa para mí, por muchas más cosas de las que se pueden escribir en un papel y de las que se pueden decir. La lista sería interminable. Menassa es sobre todo el nombre de la escritura, del pensamiento en el que intentamos habitar. También quiero agradecer a mi psicoanálisis por haberme permitido estar en condiciones de pactar. A mi madre, que ha sido más paciente que ninguna, y nunca me ha echado a los perros de la especie. A mis hermanos, con los que aprendí a dar y de los que ahora recibo tantas cosas, fue para mí una inmensa felicidad encontrar en sus caras la alegría con la que recibieron hace pocos días la noticia. A todos ustedes, compañeros, porque todo crecimiento es grupal.

Nos hemos tomado nuestros años para decidirnos. Miguel y yo nos habíamos intentado acercar hace diez años, pero ninguno de los dos tuvo cuerpo para sostener la fuerza de esa relación y para tolerar sus posibles frutos sociales, quizás porque creíamos entonces que el cuerpo es esto que se ve. Ahí vino el psicoanálisis a nuestro rescate, y nos permitió, mostrándonos que nuestro cuerpo es la obra escrita de Freud, Marx, Menassa, y más de doscientos poetas, volvernos a encontrar hace aproximadamente 1 año y medio. Digo esto porque no quiero dar la impresión de que las cosas se hacen de un día para otro.

Podría parecer que los dos hemos errado por los caminos del amor un tiempo, pero creo que es más cierto decir que estuvimos aprendiendo a amar, y aún estamos en ello. Y yo hablo por mí, creo que es una decisión muy importante en mi vida, y que la tomo con certeza, con mucho deseo y con mucho amor. Estoy francamente emocionada. Gracias a todos por compartir este gozo inmenso de anunciarles el compromiso. Qué cierto es que las cosas hay que pasarlas por la palabra para que sucedan. Yo no entendía mucho porqué un cumpleaños se convertía de repente en tres y después se sumaba este cuarto acontecimiento, y de pronto pasábamos de celebrarlo en la Escuela, que se nos quedaba pequeña para tanta fiesta, tanta alegría, tanto bien, a esta fiesta enorme y maravillosa, que celebramos hoy en este lugar entrañable que es para nosotros el Viena. Ahora entiendo que era necesario, no podía ser de otra manera. Voy a terminar con un poema.

CUMPLIR 38 AÑOS. CONOCER EL AMOR

Me corría la especie y muchas veces quiso arrinconarme,
yo zafaba, o la enfrentaba cara a cara, y le decía
que tocaba hacerse alguna vida antes de hacer otras.
Un día, el súbdito indomable de la especie, el amor,
me hirió con certero venablo envenenado.
Y hoy aquí celebramos, en mi sangre, el triunfo de su estirpe.
Este amor traspasa toda frontera de mi cuerpo,
se escapa de la imagen y se hace palabra, símbolo palpitante.
La tierna muñeca de los pasados, fallece entre mis brazos.
Ya no se trata de esperar el amor como limosna
de otros cuerpos, como tesoro de otras manos,
ahora se trata de dar sin esperar retorno.
Ahora sé que mi deseo, restallante, te acecha,
te rodea como lazo y te acerca a mis labios, que te anhelan.
Es la senda de la palabra la que cruzamos juntos.
Miguel, Miguel, mi bien amado y dulce compañero,
la llama de la poesía ilumina este día,
Y nos bendice ese vienés enorme, que nos enseñó a amar:
Freud, hemos nacido al aliento de tus páginas.
y tenemos una deuda enorme con el mundo,
prestaremos la mano, para que otros recorran

contagiados de nuestra valentía, los jardines donde la vida es verbo.
Menassa, son tus fórmulas la cuerda en que tendemos
nuestra ropa, la mesa cotidiana en que comemos.

La llama incandescente que enciende nuestras vidas.
La llave al gozo y la alegría, la clave del trabajo,
la venda fría sobre heridas del alma.

Me comprometo a vivir para vosotros: psicoanálisis, poesía,
única manera de tener una vida,
y esa es, Miguel, la senda que juntos recorremos.

Alejandra Menassa

 

POEMA A LOS 33 AÑOS

Sobrevuelo,
por última vez,
la edad de la impaciencia.
Me despido de mí,
aquello que fui.
Nazco en este instante,
con otro nombre.
Fui la ilusionada,
la impaciente loca,
la que devoraba el tiempo,
con ojos como lunas,
y apagaba la noche.
La vida transcurría,
a oscuras,
en tanta soledad.
Hoy me cuelgo,
de 33 estrellas,
pequeños soles
para alumbrar la muerte,
crueles intenciones.
No perdono lo perdido,
olvido.
Muerdo la clarividencia de tu sexo,
vivo de tantas las injusticias.
Con ojos de alambre,
con boca de pez,
mi cuerpo se borra en los espejos.
Dejo caer mis últimas lágrimas
y parto a mi nueva patria,
poblada de versos.

Helena Trujillo

Me despido de aquella que fui.
Abandono

 

SUBÍ DESDE EL AYER

A mis 32 años

Subí desde el ayer
mis brazos silenciosos
atrapando estrellas de nostalgia.

Inmensurable despedida del adiós
las manos y la voz al infinito.

Canto con voz de vino y sangre
palabras de muslos y sueños,
al son de tango y soledades,
alegrías dispuestas a vivir.

Treinta y dos galopes hacia la nada
donde locura y vértigo
vacían sus entrañas.

Palabra al infinito
cerca de Dios
abrazada al olivo y la simiente
olas de futuro bajo el sol.

Verdad del espíritu y la rosa,
vengo a vosotros para no partir
cabalgando mis años contra el tiempo.

Virginia Valdominos

 

TRES MUJERES AL BORDE DE LA HISTORIA


Eran tres mujeres de letra y de palabra.
Danzaban sobre la página de la historia
como si fuera natural danzar entre plumas
y tinteros digitales y al uso cibernético.
 
Eran como ríos sin cauce y con deseo.
Rodeadas por ninguna parte y con ley.
Semejantes y al mismo tiempo diferentes.
Caminantes sin pasos y con poesía.
 
Subidas en su propia edad construyen
su propio abismo, comparten sus goces,
ponen su deseo a trabajar para otros.
No miran para atrás sino cuando lo manda,
 
el guión, la amistad que no existe toda,
el presente siempre cesando de no ser,
el amor que une separando y separa uniendo,
el resto de su vida que habrán de escribir.
 
Hoy han abierto una flor tríplice, han hablado
una vez más, han escrito una página más.
Hoy celebran haberse conocido,
participar en la construcción de la mujer.
 
Amelia Díez Cuesta

 

PORTADORA DE LUZ

Leyendo a Alejandra Menassa
A la poeta de Alejandra, Helena y Virginia


Te dejaste tocar por tu destino
cuerpo marcado por las letras
entre las piedras de la ciudad.
Anticipándose, tus palabras , poeta,
nos mantienen alertas.
Tu voz, partiendo el horizonte,
va labrando la noche,
lleva el estandarte de la letra.
Convocada permanentemente por tu deseo
nos invitas hoy otra vez a beber juntos de la copa de la vida.
Por imposibles caminos,
mujer con sus libros bajo el brazo,
sabes que la pluma vence todo cansancio
que otros versos esperan tu mano
que sólo te debes a las palabras.
Tejiendo redes de luz
amarrada a la vida
construyes el tiempo futuro
atas a la muerte en el poema.

Claire Deloupy

 

FESTEJO PARA TRES PSICOANALISTAS

Freud dio la señal:

Hay agua esparcida en la boutique del error,
en las iras manoseadas,
en las jaulas donde falta el pan
donde el ruido como una inmensidad
pide erosiones, clemencias nevadas,
hay agua en el desierto de mi palabra.

Hoy es un cantar de nenúfares,
de años bailando el brillo del tímpano
de figuras pobladas pidiendo a los brazos:
¡Libertad al olvido,
libertad a la guerra de la voz,
libertad!

Hoy, tres cuerpos de lejano mar
escritos y pagados sobre el fruto de la luz
renuevan nuestra belleza.

Hoy, el tacto de sus palabras
es una muerte lograda.

Clémence Loonis

 

CELEBRAR

Celebrar la vida y sus sucesos,
sus luces y sus sombras,
palabras y silencios.

Celebrar la memoria.
El discurso de toda
la existencia,
con sus elevaciones
y tropiezos.

Celebrar lo que fluye.
El tiempo y el destiempo.
Todo lo que discurre
encima y por debajo
del río subterráneo
del corazón.

(Y así la nada se irá en retirada)

Emilio Porta
Café Viena. 4 de Diciembre de 2010.
Celebración de Alejandra.

 

POEMA PARA ALEJANDRA MENASSA

Es invierno lo se,
por la desnudez de los árboles,
y la quietud de la tierra
que se prepara la nueva cosecha.

Ella se deja mecer en un videntecillo tenue
hacia nuevas madrugadas.

¿Dime poeta de que piel son tus palabras?
cuando recorren las calles despertando sueños,
iluminando esquinas, perdurando en el deseo.

¿Acaso tejes con madeja de tiempo el paso necesario,
que se hunde en las entrañas de la tierra,
para el preludio de la mujer viajera
en el festín de la palabra?

Carmen Ortigosa Martín

 

POEMA PARA HELENA TRUJILLO

Movió un huracán con sus labios,
apenas unas palabras,
recordó los días de calor junto al mar,
y la mirada que quería abarcas más allá del horizonte.

Toda la tarde se le vino encima,
con un perfume de azahar
mezclado entre las gentes.

El saber que la vida palpita en cuerpo humano,
que solo con trabajo se hace el camino,
hizo que diera un paso, tras otro paso,
para construir el deseo.

Después ardió en el cuerpo de la palabra,
aconteció en la estación de la poesía.
Nadie retuvo en su memoria,
como una flor pudo dar un fruto.

Carmen Ortigosa Martín

 

POEMA PARA VIRGINIA VALDOMINOS

Recuerdo el día que te conocí,
venias dentro de un cuerpo breve
vestida con amplia sonrisa,
enmarcada por unos ojos que chisporrotean al hablar,
con flequillo a la altura de los pensamientos,
y un caudal de energía por vivir.

Como equipaje, todos lo saben,
llevabas un botón con tres agujeros,
para coserlo en las grietas de algún del alma,
un manojo de llaves multicolor
para abrir las cancelas prohibidas,
y el arma mas letal de todos los tiempo,
una hoja en blanco antesala del deseo,
donde todo el que se deja escribir sucumbe a su brillo.

Entonces como ahora
era el día de tu cumpleaños
te regale un poema y un libro de Carilda.
con mi deseo,
¡Que seas feliz y que sigas cumpliendo años!

Carmen Ortigosa Martín

 

 
 

 

CALENDARIO

2010
Publicado un artículo de Helena Trujillo en La Vanguardia
Presentación del libro "Manos forasteras" de Jaime Kozak
Recital poético musical en homenaje a Germán Pardo García
El fanatismo de Marca o el periodismo amarillo ya llegó al deporte
Señas de identidad
Sobre La Tortura
Sobre El Laicismo
Publican artículo de Virginia Valdominos en la Revista Sophia
Entrevista a Alejandra Menassa en "El Magazine"
Menassa ofreció su primer concierto al aire libre...
Menassa en la Revista "Respuesta"
2009
2008

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