24 de mayo de 2008
"Habitación 501" y "Se busca nada" nuevas presentaciones de la Editorial Grupo Cero
Miguel Oscar Menassa, Director de la Escuela de Psicoanálisis y Poesía Grupo Cero,
flanqueado por los poetas Magdalena Salamanca y Hernán Kozak
El pasado sábado 24 de mayo la sede del Grupo Cero (c/ Duque de Osuna, 4), volvió a vestirse de gala para presentar dos de sus últimas novedades de cara a la próxima edición de la Feria del Libro de Madrid, que se inaugurará el viernes 30 de mayo.
En esta ocasión, fueron presentados los libros "Habitación 501" de Magdalena Salamanca y "Se busca nada" de Hernán Kozak, compañeros del taller de poesía que coordina Carmen Salamanca, los sábados a las 16,00 horas, así como del seminario Sigmund Freud de los viernes a las 19,00, desde hace más de una década. Ambos pertenecen a la dirección de la Juventud Grupo Cero y llevan a cabo numerosas tareas de gestión y difusión en el ámbito de la poesía, el psicoanálisis y la lectura psicoanalítica de la realidad.
Lea las presentaciones de los libros:
- Habitación 501 de Magdalena Salamanca, a cargo de Cruz González (PDF)
- Se busca nada de Hernán Kozak, a cargo de Eva Méndez (PDF)
Lea los puntos de vista de:
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Magdalena Salamanca, poeta y psicoanalista del Grupo Cero, junto con su compañero de presentación Hernán Kozak, poeta y procurador. |
Magdalena y Hernán estuvieron arropados
por otros poetas mayores como Carmen Salamanca (arriba) y Alejandra Menassa (abajo) |
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Los poetas, agradecidos con Menassa por ser el único poeta vivo capaz de crear Escuela,
le muestran todo su afecto |
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Amelia Díez y Fernando Ámez,
poetas y psicoanalistas del Grupo Cero |
Desde Málaga vino para asistir a la presentación Helena Trujillo. Aquí junto a Amelia Díez. |
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Pilar Rojas, Magdalena Salamanca, Carmen Salamanca, Gerente de la Editorial Grupo Cero, Hernán Kozak y Ruy Henríquez |
Los poetas posan junto a Carlos Fernández, poeta y psicoanalista del Grupo Cero, y Eva Méndez, encargada de distribución de la Editorial Grupo Cero |
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Olga de Lucia, actriz principal de "Mi única familia"
y también poeta, posando al lado de
Magdalena Salamanca |
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Las presentaciones corrieron a cargo
de Eva Méndez y Cruz González |
Leandro Briscioli, cantante de Indios Grises, se mostró muy solidario |
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Los poetas esperaban ansiosos |
La incertidumbre se palpaba en el aire |
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Magdalena Salamanca leyó como los grandes |
Una fuerza incontenible nos arrastró a todos |
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El público escuchaba emocionado |
Indios Grises, la mejor compañía para los poetas |
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Las doctoras también se emocionaron |
Cruz González parecía un dibujo de Menassa |
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Hernán Kozak puso su voz a disposición de la poesía |
Cómo vibraban las palabras en la campana del aire |
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Entonces pasó algo...
la emoción nos hizo
llorar a todos |
"¿Es que a ti nunca te ha pasado?",
parece preguntar Hernán a Magdalena |
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Al final se fundieron los dos en un abrazo |
Mónica López, Jefa de Prensa y Comunicación Grupo Cero, Miguel Oscar Menassa y Marisa Rodés disfrutaron del recital |
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Otra de las estrellas de la noche fue Clarita,
la hija de Pablo J. García |
A ella le correspondió sacar el número del ganador
en la rifa del cuadro |
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Menassa acompañó a los poetas en la larga sesión en la que firmaron numerosos ejemplares |
Mientras firmaban todos disfrutábamos de la fiesta |
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El afortunado ganador del cuadro, obra de Magdalena Salamanca, fue el doctor Miguel Martínez,
médico y psicoanalista del Grupo Cero |
Los poetas Magdalena Salamanca y Hernán Kozak junto a Miguel Ángel Salas y su esposa |
Punto de vista
de Ruy Henríquez
El recital resultó emocionante. Hubo risas y también lágrimas. Todo lo humano se puso en juego en el ardid de las palabras y los que asistimos nos dejamos llevar sin oponernos, arrastrados por el empuje seductor de sus versos.
A pesar de llevar tantos años en el mismo taller, de haber publicado juntos en diversas revistas y de compartir innumerables recitales, difícilmente se podría encontrar dos poetas que resulten más heterogéneos. Aunque, al mismo tiempo, se podría pensar que hay en ellos algo que los hace semejantes, o más bien equivalentes. Creo que esto se podría decir, sin temor a equivocarse, de todos los poetas formados en los Talleres de poesía Grupo Cero. La letra los diferencia, pero el deseo los hace semejantes.
Si antes del recital creí que conocía la poesía de estos dos autores, durante la presentación de sus libros vi desfilar, en sus poemas, una pléyade de poetas que no había escuchado antes: Miguel Menassa, Germán Pardo García, García Lorca, Cesar Vallejo. Con Magdalena, la singladura de sus versos me condujo hasta una humanidad desconocida, forjada en la fragua tremenda de la letra. A Hernán lo escuché lúdico y travieso, tanteando en la penumbra de las frases descompuestas, los sentidos ignorados de una nueva forma de amar, de nuevas formas de pensar al hombre.
Me alegro de estar con ellos en la misma trinchera.
9 de junio de 2008
Punto de vista
de Magdalena Salamanca
El pasado sábado día 24 de mayo, en la presentación de mi último libro "Habitación 501", las sensaciones fueron muchas, las sensaciones que la poesía brinda son muchas, siempre al mando de la vida, la poesía ha ido conquistando la historia del hombre, o mejor dicho, el hombre ha ido produciendo la vida en relación a los poetas.
Desde el minuto cero, fue un acto muy emotivo, Cruz, compañera de taller y presentadora de mi libro, casi, y digo casi porque me contuve, logra en la primera frase de su presentación, despertar lágrimas en mis ojos, pero claro, era un papelón, justo antes del recital, que se me corriera toso el maquillaje.
Después de las presentaciones, junto a Indios Grises, comenzamos el recital. Yo, con un nudo en la garganta y con una vibración que me recorría todo el cuerpo, comencé mi primer bloque de lectura, en el que había un poema que estuve a punto de no leer y que, sin duda, fue el más emotivo de todos los que leí; “Mi ciudad natal”, es un poema que me trasporta, quizá, a una realidad que nunca viví pero que sentí, en la carne de la escritura.
Con el público emocionado y mucha fuerza en el gesto, Hernán comenzó a recitar, con la templanza y la tranquilidad de los grandes guerreros, pero de repente, una palabra se detuvo en su garganta y de sus cuerdas vocales comenzaron a salir, producto de la belleza y la dulzura de lo escrito, palabras entrecortadas e interrumpido aliento, que nos mostraban un sentimiento desgarrado que hizo que el público asistente, tuviera motivos para seguir emocionándose.
Fueron 40 minutos de intensa lectura y música, la poesía consiguió desnudarnos ante los presentes.
Después, durante la firma de los libros, muchas palabras, besos y abrazos que terminaron con un gran consejo de nuestro maestro Miguel Oscar Menassa, seguir trabajando pero sin descuidar poetas como Germán Pardo García o Ezra Pound.
Disfruté mucho justo a Hernán este momento que hizo de la tarde del sábado 24, una tarde una tarde diferente.
Por eso, quiero junto a Hernán, reiterar los agradecimientos a:
La Escuela de Psicoanálisis y Poesía Grupo Cero; a la Editorial Grupo Cero, a su Director Miguel Oscar Menassa; a su Gerente Carmen Salamanca; a la Responsable de Distribución Eva Méndez; a la Responsable del Departamento de Prensa y Comunicación, Mónica López; a las presentadoras de los libros, Eva Méndez y Cruz González; a los Indios Grises, sobre todo a Leandro Briscioli, Adrián Castaño y Kepa Ríos; al autor de los cuadros y dibujos que ilustran los libros, Miguel Oscar Menassa; a los responsables de la cuidada edición; a nuestra coordinadora y nuestros compañeros de taller y de trabajo y, por último, a todos las personas que nos acompañaron ese día y a todas las que nos acompañan día a día, en nuestra formación.
14 de junio de 2008
Punto de vista
de Cruz González
Me encantó la lectura de ambos autores, sobre todo porque con su “dejar hacer al que recitaba”, hicieron que los poemas tuvieran vida. Y la investigación exhaustiva de Eva me pareció sensacional.
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