11 de mayo de 2012
Poesía y Flamenco en la Fundación Miguel Castillejo de la Ciudad de Córdoba
Kepa Ríos, Miguel Oscar Menassa, Miguel Castillejo, Virginia Valdominos y
Antonio José García Uceda
Punto de vista de Cruz González
Antes de la actuación se ofreció un concierto. Miguel Oscar Menassa acompañado
por el presidente de la fundación D. Miguel Castillejo
Virginia Valdominos y Kepa Ríos
Al espectáculo acudieron numerosos invitados. Carlos Hacar dirigiendo el
Real Centro Filarmónico de Córdoba "Eduardo Lucena"
Amelia Díez, Susana Lorente, Magdalena Salamanca y Clémence Loonis
Helena Trujillo presentó el espectáculo "Ahora andarán diciendo. Poeía y Flamenco"
Kepa Ríos, en la guitarra, Miguel Menassa, con la poesía, y Virginia Valdominos, con la danza,
forman el espectáculo "Ahora andarán diciendo. Poesía y Flamenco"
Miguel Oscar Menassa y Virginia Valdominos
Kepa Ríos y Miguel Oscar Menassa
El público estaba cautivado por la fusión de Poesía y Flamenco
Virginia Valdominos
"La muerte del hombre" puesto en escena por Miguel Oscar Menassa y Virginia Valdominos,
en la compañía de Kepa Ríos
Al finalizar unas emocionadas palabras de agradecimiento
a los artistas
El espectáculo fue transmitido en directo a través de www.grupocero.tv gracias a
Amelia Díez, Magdalena Salamanca y Susana Lorente. Clémence Loonis se encargó
de la grabación de la actuación
“Ahora andarán diciendo” en la Fundación Miguel Castillejo de Córdoba
Viernes, 11 de mayo de 2012
En tierra de poetas, al aire libre, rodeados de naranjos y con un público acogedor y entendido en el arte del flamenco se produjo un nuevo espectáculo de Poesía y Flamenco.
Fuerza, estilo, emoción llenaron el escenario de la mano del poeta Miguel Oscar Menassa y la bailaora Virginia Valdominos, acompañados por la guitarra de Kepa Ríos.
La voz despertando a la ciudad para que disfrute del movimiento que va oscilando, en el tiempo del espectáculo, entre una caricia acompasada y sensual y un grito de rebeldía ante lo incomprensible del vivir.
El amor, la ternura, la muerte, la vida… desgarrando el alma sin que el alma se duela o se quebrante sino más bien un encender pasiones.
El mismo espectáculo y, sin embargo, cada vez un despliegue de versos, taconeo y notas alterando sentidos hasta lo inimaginado.
Cruz González
|