JORNADA DOCE DEL CAMPEONATO
C. D. GRUPO CERO 0 --- C.D. SPORTING SAN MARTÍN 0
Si le pidiésemos a don Mejor, un aforismo, posiblemente nos diría: “un hombre, sin otros hombres, es como un hombre sin manos, sin habla”. Gracias don Mejor.
El empate a cero goles, que el líder C.D. Sporting San Martín consiguió en su visita al feudo del C. D. Grupo Cero como segundo clasificado, mantiene la diferencia a tres puntos y aprieta aún más los puestos de ascenso, con cinco aspirantes, en un pañuelo de cinco puntos.
El domingo un equipo quiso ganar y no pudo (dueño del balón durante más tiempo, mejor posicionamiento táctico en ataque, más disparos al arco contrario…) el otro no quiso perder (ordenado defensivamente, jugando a la contra con un solo atacante y ya mediada la segunda sin prisas por poner el balón en juego) y mantiene la distancia.
Un equipo contó con oportunidades de marcar y, a juicio del numeroso público que acompaño al equipo falló varios goles. La afición del club C. D. Grupo Cero merece una mención especial: no sólo cantan el himno del club y otras entretenidas canciones, con sus viandas y bufandas jueguen donde jueguen viajan siempre con el equipo y éste domingo aparecieron, por primera vez, con una pancarta de ánimo al equipo, tambores y bocinas. Toda una fiesta y así se pudo disfrutar, en una fría y hermosa mañana, de buen fútbol.
Todo futbolero sabe que cuando en la grada se escucha repetidamente el ¡huyyy! el balón pasó cercano al arco contrario y cuando nos tapamos la cabeza con las manos: se falló una clara ocasión de gol.
El domingo el público exclamó el silbo del disparo certero con frecuencia y al menos en tres ocasiones cayeron sus brazos del cielo tapando las cabezas que ya cantaban el gol. Y sólo falla goles el equipo que, festejando antes de marcar, olvida que las oportunidades de conseguir cada gol son producidas desde el juego grupal y nunca son individuales, ni tampoco los aciertos. Puede ser, que ya estemos construyendo el primer gol del próximo partido o tomando una decisión. Pongamos algunos ejemplos:
Ejemplo uno: La decisión del ascenso es grupal. Directiva, técnicos, jugadores, socios y afición del club pueden trabajar para el proyecto grupal de: mantener la categoría, ascender o desaparecer. Y sabemos que es mayor el número de equipos que desaparecen que el de aquellos que logran ascender y mantenerse.
Segundo ejemplo: El presidente, el director, el entrenador no es el club, nada ajeno lo es si deseas pertenecer al club. Si virtuoso no eres con la pelota en los pies, siempre te puedes animar y hacerte socio del club. Los treinta socios que en pocos meses se han asociado son todos divertidos y amantes de la canción, el cine, la poesía y del fútbol también.
Tercer y último ejemplo: Solos nada podemos y el grupo puede materializar cada proyecto deportivo, más allá de sus integrantes.
Carlos Fernández del Ganso
Médico Psicoanalista
Especialista en Dirección Deportiva
www.carlosfernandezdelganso.com